El Movimiento para la Paz con Justicia y Dignidad se manifiesta para exigir justicia y dignidad para las víctimas.
En la columna del Ángel de la Independencia, el monumento más emblemático de México, reposan los restos de catorce padres de la patria. Ayer lunes, las osamentas de esos que fallecieron hace dos siglos cedieron el protagonismo a centenas de modestas cruces de madera y cartón, símbolos acostados en las escalinatas y jardines aledaños y que fueron colocados ahí para conmemorar a las decenas de miles de personas muertas en el marco del combate al crimen organizado.
El Movimiento para la Paz con Justicia y Dignidad, encabezado por el poeta Javier Sicilia, tomó la noche del pasado lunes el monumento a la Independencia mexicana para recordar a la sociedad mexicana que no ha llegado la justicia y para enviar un mensaje a los delincuentes de que las víctimas “estamos dispuestos a recuperar la dignidad”, según declaró el propio poeta.
El Movimiento para la Paz con Justicia y Dignidad, encabezado por el poeta Javier Sicilia, tomó la noche del pasado lunes el monumento a la Independencia mexicana para recordar a la sociedad mexicana que no ha llegado la justicia y para enviar un mensaje a los delincuentes de que las víctimas “estamos dispuestos a recuperar la dignidad”, según declaró el propio poeta.
Desde que surgiera hace seis meses, el Movimiento por la Paz ha realizado dos largas caravanas, una hacia el norte y otra hacia el sur del país, recorridos que han logrado que sean escuchadas las voces de las familias de víctimas caídas en el marco del combate a narcotraficantes y extorsionadores. A unas cuantas horas de la conmemoración de los fieles difuntos, de la mano de Sicilia y de otras personas que pasaron de víctimas a líderes de este reclamo por justicia, los dolientes realizaron una celebración ecuménica a un costado del Ángel de la Independencia en memoria de los fallecidos.
Unas horas antes de la velada, en el Palacio Nacional, el presidente Felipe Calderón se había reunido con representantes de los poderes y los gobernadores del país para revisar la agenda de la seguridad. Se trata del encuentro número 31 y una vez más lo que destacó fueron una serie de declaraciones que lo único que dejan claro es que la clase política mexicana fracasó en su intención de lograr que antes del 2013 estuvieran certificados, mediante exámenes de control, todos los policías de los estados.
Diversos cálculos cifran en 50 mil las personas fallecidas en forma violenta desde que en el inicio de su gobierno el presidente Felipe Calderón lanzó una ofensiva en contra de la delincuencia organizada.
Esta noticia llegó a su fin. Si te fue de utilidad o simplemente te gustó, te invito a que veas otros titulares, por ejemplo, dentro de su misma sección. ¡Gracias por leer Positivo Digital!
Fuente: El País
0 comentarios: