Modifica el Código de Consumo para velar por los intereses de los clientes.
Estos cambios legales tienen como finalidad principal evitar cláusulas o intereses abusivos, así como controlar la información que se da a los clientes y la posible publicidad engañosa. También incluye esta reforma la promoción de la mediación y el arbitraje para resolver los conflictos en casos que afecten a las viviendas habituales y reducir los casos traumáticos de deshaucio. Esta regulación no tendrá efectos retroactivos.
Una infracción grave podrá ser sancionable hasta 100.000 euros de sanción, según ha explicado el portavoz del ejecutivo autonómico, Francesc Homs, tras la reunión semanal del gobierno. Respecto a la sentencia del Tribunal Constitucional, que avala el impuesto catalán de grandes superficie, Homs ha lamentado que haya tardado tanto en resolver este asunto, que se remonta a 2001, pero valora positivamente que avale la política comercial del gobierno de CiU de entonces que liga con un modelo de consumo de nuestro país. Es una buena noticia".
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